Salud integral

¿Mi cuerpo le importa a Dios? (cristianos, didáctico /evangelístico, la mente de Cristo)

Como cristianos muchas ocasiones hemos perdido el rumbo en el cuidado de nuestro cuerpo, sin darnos cuenta en todo lo que podemos afectar, nuestro desarrollo físico y espiritual; podrán decir algunos, pero ¿por qué el espíritu podría afectarse?, está comprobado que una alimentación sana y equilibrada contribuye a una mayor concentración, mejor salud, inclusive mejores relaciones interpersonales; pero a mí como cristiano ¿en qué me afecta? La repuesta es, en la mayordomía de la salud.

Yo era una persona con problemas de obesidad severa; recuerdo que cuando llegué al evangelio, haciendo referencia a que somos templos yo decía: "yo soy una catedral". Lo que en realidad se reflejaba era falta de dominio propio, al paso del tiempo leyendo la carta a los Romanos, tuve un despertar, el Señor me confrontó en mi pecado, el exceso de trabajo, pocas horas de sueño y alimentos chatarras, estaba prácticamente echando a la basura lo que Dios había rescatado, así que una dieta por un año completo yo le llamo "mi quimioterapia", porque incluso perdí mucho cabello, pero aprendía a comer, a pesar y valorar lo que Dios me ha dado, bajé 60 kilos para gloria de Dios y bien mío. En el proceso alguien me preguntó, y ahora que está delgada ¿es mas espiritual?, mi primera reacción fue decir "NO", pero al día siguiente la pregunta me resonaba, y de repente Romanos 12:1-2, que nos habla de ofrecer nuestros cuerpos como sacrificio espiritual y de la renovación de la mente; es Dios mostrándome que voy por buen camino, porque quiero agradarle y servirle. Pensé, Señor me estas dando crecimiento y entendimiento, estoy probando del fruto del Espíritu "dominio propio".

Para poder servir mejor al ministerio, cualquiera que este sea, es necesario mantener nuestros cuerpos en condiciones óptimas. Con la alimentación que llevé, me di cuenta que mi voz se mejoró de manera que puedo cantar mejor, las alergias se retiraron, y con esto muchos más beneficios; la disciplina del ayuno mejoró al entender que no se trata sólo de dejar de comer, sino que, al entregar el ayuno, debes de comer de manera moderada, lo cal trae beneficios también en la salud.

Somos responsables de ejercer sabiduría incluso en lo que comemos, la alimentación es una necesidad fisiológica primaria "sin alimento no podemos vivir"; así mismo, como seres tripartitos debemos alimentar nuestro espíritu con la Palabra de Dios, para que esté robusto ante las necesidades del cuerpo incluso aquellas que no parecen pecaminosas.

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